Marta Yáñez, la juez encargada de investigar lo ocurrido al submarino de la Armada Argentina ARA San Juan, cuyo rastro se perdió en el Atlántico hace hoy cuatro meses, aseguró que su pretensión es llegar a una conclusión "categórica y creíble".

"Mi conclusión tiene que ser categórica y creíble. Solo voy a llamar a (declaración) indagatoria cuando toda la información apunte a dos o a cinco cabezas, no antes", afirmó Yáñez en declaraciones publicadas este jueves en el diario La Nación.

La jueza reiteró que la citación a declarar como investigado a alguien "es cuando pueda hacerles cargo de la comisión de un delito por acción o omisión, no antes".

En los últimos meses, Yáñez, que dirige un proceso que de momento solo busca determinar si existió delito alguno en torno a la desaparición del buque, ha recibido en su juzgado, en la localidad patagónica de Caleta Olivia, a diversas personas que han comparecido como testigos.

Entre ellos dos tripulantes que no llegaron a embarcarse en el ARA San Juan, cuando se disponía a realizar el camino de vuelta de su último viaje, desde el puerto austral de Ushuaia hasta la ciudad bonaerense de Mar del Plata, durante el cual desapareció el 15 de noviembre pasado.

También el capitán de navío y portavoz del cuerpo castrense Enrique Balbi, que como fue comandante de otro submarino se espera que pueda aclarar "la gravedad de las falencias" que se detectaron en el buque en 2016, que se investiga si fueron solucionados y si de lo contrario pusieron en peligro la nave y a sus 44 tripulantes.

En los próximos días se prevé que la jueza tome declaración a otros miembros de la Armada y extripulantes del ARA San Juan.

Yáñez confirmó que el expediente cuenta con todas las comunicaciones establecidas con el submarino entre el 8 y el 15 de noviembre.

"Acá van a venir todos los que tienen que descifrar. Voy a empezar de arriba para abajo y no va quedar nadie sin testimoniar", afirmó.

El pasado lunes, diversos familiares de los tripulantes mantuvieron una comunicación con el equipo judicial de la causa a través de una videoconferencia.

"Quería que me conozcan a mí y a mi equipo y sepan que la causa no se durmió", explicó Yáñez, al remarcar que a ella no le "atan" ni la conclusión de la Armada ni el informe final de la comisión de expertos creada por el Ministro de Defensa.

Según la investigación, una revisión de finales de 2016 detectó "fallas de alistamiento" al ARA San Juan, en la navegabilidad, que "podrían poner en peligro tanto al ARA como a la tripulación".

La jueza aclaró que "testimonio a testimonio" permitirá determinar si lo que estaba auditado implicaba que el submarino no podía navegar.

La búsqueda del submarino en el océano, hasta ahora infructuosa, se delimitó a 430 kilómetros de la costa patagónica, en torno a una zona donde varias agencias internacionales informaron de la detección de una explosión horas después de que desapareciera la nave.

En su última comunicación con tierra, en las primeras horas del 15 de noviembre, el comandante del San Juan había informado a sus superiores que se había producido un principio de incendio en un compartimento de baterías por la entrada de agua a través de un conducto de ventilación; un problema que según la Armada fue resuelto y el submarino pudo seguir su viaje hacia su destino final.

En estos meses, además del caso abierto en la Justicia, en el que diversos familiares son querellantes, se abrió una investigación interna en el seno de la Armada y el almirante Marcelo Srur fue destituido por el Gobierno como jefe del cuerpo castrense.

También se creó en el Congreso de la Nación una Comisión Especial Investigadora.

Al cumplirse hoy 4 meses de la última comunicación del submarino con tierra, los familiares y allegados de los marineros convocaron a los ciudadanos a salir esta tarde a las plazas de ciudades de todo el país para exigir que continúe la búsqueda.

EFE